Cómo recuperar el calor de una sala de servidores para generar agua caliente sanitaria

Un edificio propiedad del Ayuntamiento de Pamplona (Navarra) se ha convertido en una de las instalaciones punteras a nivel nacional al combinar diferentes tecnologías de recuperación de energía térmica, generación renovable (cubierta fotovoltaica), almacenamiento de energía eléctrica (con la implementación de baterías eléctricas de segunda vida) y tecnología de vehículos eléctricos V2G.

A través del programa europeo Stardust (del que Pamplona es “ciudad piloto”), el consistorio de la capital navarra ha puesto en marcha un sistema de recuperación de calor en el Centro de Procesamiento de Datos (sala de servidores) de la empresa pública Animsa a través del cual se obtendrá agua caliente sanitaria (ACS) en todo el edificio, mejorando de esta forma la eficiencia energética al obtener una reducción de la demanda de gas natural para la producción de ACS de entre un 60 y un 80% (lo que supone rebajar entre un 10 y un 14% el gasto total de gas natural).

La solución parte de la demanda constante de refrigeración que necesita el Centro de Procesamiento de Datos para la extracción del calor generado por los equipos informáticos. Ese calor es el que se recupera de la enfriadora por medio de una instalación térmica con un sistema denominado Boostherm. La instalación se ha mejorado por medio de un depósito de inercia que permite, además de aprovechar el excedente, optimizar la eficiencia energética del conjunto de la instalación.

La inversión realizada ha alcanzado los 78.000 euros -el 70% financiado con fondos europeos a través del proyecto Stardust-, la empresa Navas ha sido el proveedor del sistema y Eulen y Erisa se han encargado del desarrollo de la fontanería.

Microrred eléctrica inteligente

Por otra parte, y también como parte del proyecto europeo Stardust, en este edificio se está implantado en la actualidad una microrred inteligente que será la encargada de gestionar la energía eléctrica generada por los paneles solares fotovoltaicos instalados en la cubierta. Esta nueva instalación define, según el Ayuntamiento de Pamplona, “un nuevo modo de generar y gestionar energía eléctrica renovable, que además contará con almacenamiento en baterías de segunda vida y tomas de recarga para vehículos eléctricos con tecnología V2G”.

Al finalizar todos los trabajos, el edificio “pasará de ser un mero consumidor de energía eléctrica a convertirse en prosumidor, definición descrita en el Paquete de Invierno de Directivas Europeas. Un prosumidor es un usuario de energía eléctrica que además de demandar energía de la red de distribución es capaz de generar parte de esa energía en su propia instalación”.

En este caso, la instalación fotovoltaica instalada será capaz de generar entre el 10 y el 15% de la demanda total del edificio.