REHVA desarrolla una guía para calcular la energía primaria y el CO2

La Federación Europea de Asociaciones de Calefacción, Ventilación y Aire Acondicionado (REHVA) ha publicado una guía detallada para el cálculo de la energía primaria y los indicadores de CO2 según la Directiva revisada sobre eficiencia energética de edificios (EPBD).

Este documento es esencial para la aplicación de la EPBD, ya que explica los principios de eficiencia energética y proporciona ejemplos prácticos de cálculos de energía y emisiones de CO2, incluidos los necesarios para edificios de cero emisiones.

La directiva actualizada introduce nuevos elementos, como el cálculo de indicadores de energía primaria basado en la energía total en lugar de solo la energía no renovable. Esto representa un desafío para los expertos en energía de los Estados miembros, quienes deben asegurar la implementación de estos nuevos requisitos.

La guía de REHVA incluye una metodología detallada, con límites de evaluación y pautas de cálculo, junto con ejemplos prácticos. Un caso ilustrativo es un edificio multifamiliar con bomba de calor aire-agua, sistema fotovoltaico de 30 kW y calefacción urbana eficiente. Este ejemplo incluye datos sobre las necesidades energéticas simuladas por hora y la generación fotovoltaica, facilitando así la adopción de la EPBD.

Uno de los principales desafíos es calcular la energía primaria total en edificios que utilizan tecnologías como bombas de calor y paneles solares. La guía de REHVA destaca la importancia de adherirse al principio de «eficiencia primero«, que prioriza la reducción del consumo de energía antes de utilizar fuentes renovables. También se discuten varias opciones para la transición de los requisitos mínimos de rendimiento energético nacional.

Por último, la guía enfatiza en la necesidad de un indicador operativo de CO2 para garantizar que las tecnologías que no provocan emisiones operativas de CO2 no se vean desfavorecidas en comparación con las tecnologías convencionales.

Esta iniciativa tiene como objetivo asegurar que todos los edificios nuevos y renovados cumplan con los estándares de eficiencia energética y contribuyan a la reducción de emisiones de CO2 en Europa.