La energía solar térmica crece en todo el mundo 

La energía solar térmica sigue creciendo en todo el mundo. Y según el informe “Solar Heat Worldwide 2023” elaborado por el Programa de Colaboración en Tecnología de Calefacción y Refrigeración Solar (SHC TCP) de la Agencia Internacional de la Energía (IEA), se prevé que lo siga haciendo este año.

La última referencia fueron los 17 GW instalados en 2022 o los 24 millones de metros cuadrados de colectores con una capacidad total de 540 GW. En términos de impacto medioambiental, en 2022 el rendimiento global de todas las instalaciones de energía solar térmica supuso un ahorro de 47,48 millones de toneladas de petróleo y 153,3 millones de toneladas de CO2.

Con los 17 GW de nueva capacidad instalada en 2022, la capacidad solar térmica a nivel mundial alcanzaba los 540 GW. Una cifra que la sitúa en tercer lugar en relación con la capacidad de otras energías renovables, tras la capacidad instalada de energía eólica de 906 GW y la de la energía fotovoltaica con 1.153 GW.

El informe elaborado por el Programa de Colaboración en Tecnología de Calefacción y Refrigeración Solar (SHC TCP) se basa en los datos aportados por 71 países de todo el mundo, lo que supone una evaluación muy completa del conjunto de los mercados mundiales de calefacción y refrigeración solar.

La solar térmica crece en Europa

Pese a que el mercado mundial experimentó un ligero retroceso de un 9,3% en el pasado ejercicio en comparación con los datos que se registraron el año anterior -debido sobre todo al freno registrado en China e India, principales causantes de esa contracción-, en Europa la energía solar térmica creció de forma considerable.

Italia, Grecia y Polonia se anotaron, por segundo año consecutivo, una evolución muy positiva en el mercado de energía solar térmica. Después de un increíble crecimiento del 83% en 2021, el mercado italiano se apuntó una subida en 2022 del 43%.

Por su parte, Grecia registró resultados también muy positivos, con un crecimiento del 18% en 2021 y del 17% al año siguiente. Polonia también mostró una robusta fortaleza de su mercado interno de energía solar térmica con unos aumentos del 17% y del 11% en 2021 y 2022, respectivamente.

Y no nos podemos olvidarnos de Francia, que fue otro de los países que terminó el año con unos resultados positivos al experimentar un crecimiento del 29%. Algo que supuso una novedad, al igual que el aumento registrado por Chipre con un 5%.

Otro dato que sostiene el vigor de la energía solar térmica a nivel mundial -y en el mercado europeo en particular- fue el incremento experimentado en Alemania por la instalación de colectores de calefacción a lo largo de 2022: un 22% con respecto al año anterior.

Una tendencia alcista que, según el informe, parece que tendrá continuidad este año 2023 y los siguientes. No en vano, otros nueve sistemas que representan una superficie colectora de 28.000 metros cuadrados (19,6 MW) están en construcción actualmente o en una avanzada etapa de planificación. Además de los 66 que, con una superficie de colectores de 454.550 metros cuadrados (318 MW), están en fase de estudio.

En abril de este año se anunció la construcción de la que será la mayor planta de calefacción urbana solar de Alemania, con una superficie de colectores de 65.000 metros cuadrados (45,5 MW de capacidad) y con una puesta en marcha prevista para el año 2025.

Otro de los países europeos en donde la energía solar térmica también está tomando velocidad son los Países Bajos. En ese país está previsto que concluya este año la instalación de un sistema de calefacción solar urbana a gran escala en la ciudad de Groningen. Una planta que cuenta con una superficie de captación de 48.000 metros cuadrados (33,6 MW de capacidad).

También en la zona de los Balcanes Occidentales, concretamente en Kosovo y Serbia, está emergiendo la energía solar térmica. Actualmente, se está planificando una planta solar térmica en Pristina, la capital de Kosovo, que incluye un área de colectores de 58.000 metros cuadrados (40,6 MW de capacidad) y 408.000 metros cúbicos estacionales, que entrarán en funcionamiento en 2024. Y en Serbia están previstas dos plantas urbanas con estudio de viabilidad de una superficie de 35.000 metros cuadrados (24,5 MW de capacidad).

Otro sector que muestra señales positivas de crecimiento en este año es el de las plantas de energía solar para procesos industriales (SHIP por sus siglas en inglés Solar Heat for Industrial Processes). A lo largo de 2022, al menos 114 nuevos sistemas SHIP con 30 MW de capacidad se instalaron en todo el mundo. Y el número de plantas con capacidad de varios MW que se pondrán en funcionamiento en Europa hasta final del presente ejercicio se espera que se multiplique por siete. España aportará a ese crecimiento dos sistemas de 28,5 y 4 MW, respectivamente.

Calefacción y refrigeración con solar térmica

En 2022, de acuerdo con el informe de la IEA Renovables, el 53% de la energía final se destina a calefacción, mientras que otro 44% se destina a calentar espacios y agua en edificios. El resto -un 3%- se utiliza en la agricultura, principalmente para calentar invernaderos.

Actualmente, los combustibles fósiles son los que predominan para cubrir la necesidad de calefacción. Si dejamos a un lado la biomasa tradicional, únicamente el 11% de esas necesidades a nivel mundial se cubrieron con energías renovables en 2021. Una cifra que remarca la urgente necesidad de encontrar soluciones que ofrezcan una generación de calefacción más sostenible. Asimismo, el informe indica que el consumo global de calor, excluyendo el calor ambiental, aumentará un 6% hasta 2027. Demanda que en menor medida se cubrirá con la electrificación del sector de la calefacción.

Según datos del informe, la energía solar térmica proporciona calor verde a 115 millones de clientes en todo el mundo con una facturación de 17.600 millones de euros, y el sector emplea a unas 389.000 personas.