Estufas y calderas de pellets ganan cuota frente a otras soluciones

El alza de los precios de la electricidad y el gas y la incertidumbre ante la capacidad de suministro debido a la guerra en Ucrania está provocando que ante la próxima campaña de calefacción (que ya tenemos encima pese a la benigna climatología) los usuarios se planteen cuál es la solución más adecuada para cubrir sus necesidades y busquen nuevas alternativas.

En este entorno inestable, las calderas y estufas de pellets van ganando nuevos adeptos. Tras un año 2021 que cerró con un crecimiento del 40% en el número de instalaciones, el sector representado por Avebiom estima seguir ganando cuota de mercado durante este ejercicio. A falta de los últimos meses del año, según diversas fuentes las ventas de estufas de pellets crecen a un ritmo superior al 40% y las calderas por encima del 10%. En otros países de Europa, esos datos incluso son superiores, llegando en el caso de las estufas a un 50% en Francia e Italia y duplicándose en el de las calderas en Alemania.

Autonomía y eficiencia

Las razones de este crecimiento del interés por la instalación de estufas y calderas de pellets se concentran básicamente en dos puntos. Por un lado, la autonomía y la solución efectiva que supone para viviendas unifamiliares en entornos rurales. Sin olvidar tampoco los proyectos comunitarios que se han y están ejecutando de redes de suministro de calefacción y agua caliente sanitaria para comunidades de vecinos de barrios enteros (como es el de la Txantrea en Pamplona, Navarra) que tienen como fuente de calor calderas de biomasa. Y, por otro, en que significan dar el paso hacia una solución eficiente basada en una energía renovable.

Otra de las razones es la seguridad en el suministro, según apuntan desde Avebiom, que ofrecen tanto pellets como otras biomasas que son de origen local. Una seguridad que también se basa en el margen que aún existe para el incremento de la oferta, ya que actualmente en España únicamente se aprovecha el 40% del crecimiento anual de la madera de los bosques, cuando en Europa la media es superior al 60%.

Pellets: a más demanda, subida de precio

En cualquier caso, y frente a la estabilidad habitual en el precio de los pellets, la alta demanda de las últimas semanas (fruto de un mayor consumo por el incremento de las instalaciones, del adelanto de las compras para garantizar las reservas y del aumento de los costes de producción) se ha traducido en un importante incremento de su precio superior al 60%, “notable -apuntan desde Avebiom-, pero inferior al que se da en cualquier combustible fósil o en la electricidad”.

De todas formas, desde la asociación descartan que pueda llegar a una situación de desabastecimiento por la fuerte demanda, aunque sí que «pueda haber tensiones en algún momento puntual y en alguna zona concreta que se traduzcan en plazos de entrega más dilatados de lo acostumbrado. Actualmente, las fábricas de pellets de España están trabajando para garantizar el suministro durante esta temporada, por lo que habrá pellets y también otros biocombustibles sólidos como astilla, leña y hueso de aceituna”, concluyen.

Unos precios que se verán amortiguados tras la aprobación por el Consejo de Ministros de una rebaja del IVA del 21 al 5% en los suministros de gas natural, pellets, briquetas y leña.