Tuberías plásticas: eficiencia, sostenibilidad y versatilidad
Hoy en día las tuberías de plástico, pese a ser apenas visibles, están presentes en la práctica totalidad de edificios residenciales y no residenciales, siendo esenciales para el buen funcionamiento, entre otros, de los sistemas de producción y distribución de agua fría y caliente, calefacción y refrigeración, ventilación, aire acondicionado o evacuación, contribuyendo, además, a un consumo energético eficiente.
La durabilidad de los materiales que se utilizan para su producción, así como su capacidad de adaptación y su sencillez de montaje -facilitando el trabajo a los instaladores profesionales-, su durabilidad y seguridad convierten a las tuberías de plástico en la mejor opción en todo tipo de proyectos de edificación y rehabilitación.
Pero por si esto fuera poco, su fabricación conforme a normas nacionales, europeas e internacionales con los más altos estándares de calidad les permite cumplir con los requisitos y exigencias necesarios para cada tipo de aplicación. Además de ser sostenibles, ya que, de acuerdo con estudios científicos realizados, su huella ambiental es de media equivalente a un tercio de la de otros materiales alternativos.
Mejoras en la eficiencia energética
No sufren corrosión, su superficie lisa evita incrustaciones (manteniendo un caudal constante), son fáciles de instalar, versátiles y adaptables, son reciclables… y tienen mucho que aportar en la consecución del objetivo de disminuir el consumo energético.
Amanda Gomes, técnico del Grupo Sectorial Tuberías Plásticas de ANAIP (AseTUB), señalaba en un artículo reciente que “la industria de los plásticos tiene mucho que aportar al sector de la construcción en la búsqueda de viviendas más eficientes que permitan reducir las emisiones y disminuir el consumo energético. Su contribución se basa en dos pilares que hacen de los plásticos grandes aliados para la sostenibilidad: su larga duración y su eficiencia. Dos características que están presentes en las tuberías plásticas: están diseñadas para tener una vida útil de más de 50 años, son fáciles de instalar debido a su ligereza, contribuyen a la eficiencia energética de los edificios y necesitan un mantenimiento mínimo”.
El uso de tuberías de plástico para los nuevos sistemas de calefacción y refrigeración está en auge debido a que facilitan una mayor absorción de fuentes de calor renovables, demostrando ser altamente eficientes energéticamente en un momento en el que todos somos más conscientes de la necesidad de regular el consumo de energía. Ludo Debever, miembro de la Asociación Europea de Tuberías y Accesorios de Plástico (TEPPFA), explicaba en una de las jornadas técnicas de la citada asociación que “las tuberías de plástico han demostrado ser componentes ideales para tales sistemas y también se pueden lograr importantes ahorros de energía a largo plazo”.
En los sistemas de calefacción por suelo radiante, paredes o techos generalmente es suficiente temperaturas de funcionamiento bajas (35/28º C), que son perfectas para la transferencia de calor mediante calderas de condensación, bombas de calor y sistemas solares térmicos. Y cuanto menor es la temperatura que necesita el sistema de calefacción, mayor será su eficiencia.
Son varios los países europeos (incluido España) que tienen un potencial significativo de un crecimiento en el uso de este tipo de sistemas integrados de calefacción y refrigeración. Y dado que es probable que las temperaturas extremas se vuelvan comunes, será mucho más deseable encontrar un sistema que funcione de manera eficiente y económica durante esos episodios más extremos.
Más sostenibles que los materiales alternativos
De acuerdo con los resultados de un estudio reciente del Instituto para la Investigación Tecnológica de Flandes (VITO), la huella ambiental de las tuberías plásticas es de media equivalente a un tercio de la de materiales alternativos como el hormigón, el cobre o la fundición dúctil, siendo por tanto más sostenibles que éstos.
El estudio se realizó mediante una comparación entre diferentes tipos de materiales, evaluando y analizando cada etapa de su ciclo de vida. En este caso, para cada aplicación específica las comparaciones se realizaron según las normas ISO 14040 y 14044 en vigor, utilizando la misma unidad funcional para los distintos materiales comparados.
La “huella ambiental” se debe evaluar analizando todo el ciclo de vida de un producto, desde la fabricación de las materias primas utilizadas para su construcción, su transformación, transporte, instalación y utilización durante su vida útil, y, finalmente, la eliminación o reprocesado del producto al final de su vida.
En este estudio se realizaron comparaciones directas entre tuberías plásticas de Polipropileno o PVC y tuberías de fundición dúctil para sistemas de evacuación; tuberías de polietileno o PVC y tuberías de fundición dúctil en sistemas de abastecimiento de agua a presión; tres diferentes tipos de tuberías de PVC o Polipropileno y tuberías de hormigón en sistemas de saneamiento sin presión; y tuberías de Polietileno reticulado (PE-X) o multicapa PE-PEX/AI/PE-PEX y tuberías de cobre en sistemas de agua fría y caliente. Y tras esta evaluación se concluyó que, de media, el uso de sistemas de tuberías plásticas reduce en dos tercios la huella ambiental en comparación con materiales alternativos.
Aplicaciones de las tuberías plásticas
Las tuberías de plástico, pese a estar generalmente ocultas y apenas las podamos ver, están omnipresentes tanto en la edificación residencial como no residencial. Y, sin darnos cuenta, contribuyen de forma esencial a nuestro bienestar aportando sus cualidades a, entre otros, sistemas como:
Calefacción y refrigeración, ventilación y aire acondicionado. Las tuberías de plástico desempeñan un papel central en aplicaciones de calefacción y refrigeración como la calefacción por suelo radiante (y otros sistemas radiantes en paredes y techos), conexiones de radiadores, calefacción central o sistemas de ventilación.
Evacuación. Las múltiples ventajas de las tuberías plásticas para suelo y desagüe las han convertido en la opción común en la mayoría de los mercados para transportar los desechos de los hogares al alcantarillado.
Producción y distribución de agua fría y caliente. Los sistemas de tuberías de plástico son la mejor opción para el suministro y distribución de agua fría y caliente dentro de los edificios y ofrecen considerables ventajas.
Canalones y bajantes. Las canaletas de plástico para lluvia son la mejor opción para evitar la entrada de agua en los edificios y canalizarla lejos de muros y cimientos, gracias a su ligereza, flexibilidad y durabilidad.
Tipos de materiales plásticos
En los sistemas de tuberías de plástico se utilizan varios tipos de materiales plásticos, cada uno de ellos con una amplia gama de propiedades. Estos son los principales:
PVC. El Cloruro de Polivinilo o PVC es el material de la tubería que tiene el historial más largo de todos los materiales plásticos. No en vano las primeras tuberías de PVC se fabricaron en la década de 1930. Varios estudios en los que se ha investigado la larga trayectoria de las tuberías de PVC han confirmado que las tuberías de agua a presión de PVC, cuando se instalan correctamente, tienen una vida útil de más de 100 años.
Existen otras variantes basadas en el material de PVC estándar: CPVC, variante de alto rendimiento que se usa específicamente para aplicaciones en interiores en el suministro de agua caliente; PVC-O, una variante que representó un hito importante en la historia de la tecnología de tuberías de plástico, ya que su estructura molecular -que se crea mediante un estiramiento biaxial del material durante el proceso de extrusión- proporciona a estas tuberías una resistencia muy elevada.
- El polietileno o PE es un material termoplástico resistente. Las tuberías de PE se utilizan para aplicaciones como el transporte de agua potable y gas natural, riego, alcantarillado y líneas de drenaje. Utilizado para tuberías desde principios de la década de 1950, es ligero, flexible y fácil de soldar. La evolución continua del material -de que varios también han demostrado que puede tener una vida útil de más de 100 años- ha mejorado su rendimiento y permitido desarrollar nuevas propiedades, como por ejemplo el PE-RC, que tiene una gran resistencia contra el agrietamiento.
- El PP es un polímero termoplástico hecho de polipropileno que se viene utilizando para tuberías desde la década de 1970. Su alta resistencia al impacto combinada con una buena rigidez y excelente resistencia química, lo convierten en un material muy adecuado para aplicaciones de alcantarillado. Un grado especial de este material llamado PP-R es un copolímero para aplicaciones de alta temperatura que permite su uso para el suministro de agua caliente en el hogar y muchas otras aplicaciones de tuberías industriales.
PEX. El polietileno reticulado se conoce comúnmente como PEX, y los diferentes métodos de reticulación se expresan con letras diferentes: PEX-A, PEX-B, PEX-C y PEX-E. El PEX se utiliza para tuberías en Europa desde principios de la década de 1970 y ha ganado una rápida popularidad en las últimas décadas. Su flexibilidad y su resistencia a temperaturas -que van desde debajo del punto de congelación hasta casi el punto de ebullición- lo convierten en un material de tubería ideal para instalaciones de agua fría y caliente, conexiones de radiadores, calefacción por suelo radiante, descongelación y aplicaciones de refrigeración de techo. Cuando se utiliza para aplicaciones de calefacción, las tuberías se cubren con una capa de barrera para evitar la penetración de oxígeno a través de la pared de la tubería. PEX y también PE-RT se pueden combinar con una fina capa intermedia de aluminio con dos propósitos: como barrera contra el oxígeno y para aumentar la rigidez longitudinal de la tubería.
- El polibutileno, un polímero termoplástico hecho de butileno, se inventó durante la década de 1950 y se usó ampliamente desde la década de 1980. PB combina la resistencia a altas temperaturas con una altísima flexibilidad que facilita la instalación. PB ha encontrado un buen uso en la instalación de agua fría y caliente.
PE-RT. El Polietileno de Resistencia a Temperatura Elevada o PE-RT amplía las propiedades tradicionales del polietileno, con una mayor resistencia a altas temperaturas. Esta cualidad hace que el PE-RT sea ideal para una amplia gama de aplicaciones de tuberías de agua fría y caliente.
ABS. El acrilonitrilo-butadieno-estireno o ABS es un material termoplástico que se desarrolló originalmente a principios de la década de 1950 para su uso en yacimientos petrolíferos y en la industria química. Se utiliza principalmente en aplicaciones industriales donde la alta resistencia al impacto y la rigidez son esenciales.
